"El insulto deshonra a quien lo infiere, no a quien lo recibe." ~Diógenes de Sínope
Lo dicho por Pedro Pablo Kuzcysnki sobre el determinismo, a manera que las conductas se dan por o algún motivo predeterminado y hereditario es una falacia. Esta falsa premisa “de tal palo tal astilla” trae a la mente recuerdos, de como muchos cruzaron barreras y rompieron cadenas de círculos viciosos para superarse. Las conductas no se heredan, ni pasan de padres a hijos, por una simple razón, la existencia del libre albedrío, la libertad y la capacidad que tenemos llegada una edad de diferenciar lo bueno de lo malo, de tomar decisiones y responsabilidad por actos propios. Un candidato que aspira a darle una mejor vida al ciudadano peruano, no puede decirle que como es “hijo de”, será como tal, entendido ser pobre, ratero, violento, sin esperanzas, estancado. Mucho menos en un país donde cunde la violencia, la delincuencia, la falta de educación, y donde se tiene que hacer una tremenda labor para ayudar a los jóvenes a salir de este mundo enajenado.
Por tal razón debemos creer ¿qué los ciudadanos en Curgos y Condomarca, en la Libertad, José Sabogal y Chetilla en Cajamarca, deben seguir confinados a la pobreza? Entonces que sentido tiene querer ser Presidente de todos los peruanos, si desde ya los “hijos de” están etiquetados y destinados al fracaso. ¿Quiere PPK ser Presidente de solo un grupo de peruanos?
No comments:
Post a Comment